Frecuentemente las personas afectadas no están seguras de los que les pasa y esperan demasiado tiempo antes de pedir ayuda, lo que pone su vida en serio riesgo. Estas son algunas señales que pueden indicar la ocurrencia de un ataque al corazón.

Algunos ataques al corazón son repentinos e intensos como “el ataque al corazón de película”, en el que la persona respira con dificultad, se aprieta el pecho y cae al piso dramáticamente.  La mayoría de los ataques por el contrario, comienza lentamente con un ligero dolor o incomodidad.

Frecuentemente las personas afectadas no están seguras de los que les pasa y esperan demasiado tiempo antes de pedir ayuda, lo que pone su vida en serio riesgo.  Estas son algunas señales que pueden indicar la ocurrencia de un ataque al corazón.

• Malestar en el pecho: en general es en el medio del pecho y dura más de unos minutos, o se va y luego vuelve.  Se puede sentir presión incómoda, constricción, congestión o dolor.
• Malestar en otras áreas de la parte superior del cuerpo: puede incluir dolor o malestar en uno o los dos brazos, la espalda, el cuello, la mandíbula o el estómago. Estos síntomas pueden ser la primera forma de presentación en la mujer.
• Dificultad para respirar: suele venir junto con malestar en el pecho. Pero puede ocurrir antes de que comience el malestar en el pecho.
• Otras señales: pueden incluir sudor frío, náuseas o mareos.

¿Y qué debería hacer si ocurren estos signos y síntomas?

Entre en acción!  Si ocurre un ataque al corazón, es muy importante recordar estas cosas:

Si tú o alguien siente malestar en el pecho, especialmente con una o más de las otras señales, no esperes más de 5 minutos antes de pedir ayuda. Dirígete al centro de urgencias más cercano.

Si eres tú quien tiene los síntomas, no manejes, a menos que no tengas otra opción.

Es importante mencionar que las mujeres, en general se demoran más en ir a la urgencia cuando están sufriendo un ataque. Esto sucede en parte, por que les cuesta más creer que están sufriendo un ataque y porque sus signos son más confusos que los de los hombres. Al igual que ellos, el síntoma más común en las mujeres es el dolor o malestar al pecho. Sin embargo, ellas tienden a experimentar más síntomas indefinidos, como dificultad para respirar, nauseas, vómitos y dolor de espalda o mandíbula.